Sala de Prensa

21/08/2013

Los detalles del vuelco en bullado caso ocurrido en Ñuñoa

Sobreseen a joven y a abogada que fueron falsamente acusados por carabineros

El tribunal acogió el sobreseimiento definitivo solicitado por el defensor público Cristián Medina, quien presentó una denuncia contra los policías.

Por José Ignacio Aguirre O.,
Defensoría Regional Metropolitana Norte.

El 27 de abril de 2013, Daniel Briones (22) concurrió junto a su esposa, Daisy Ureta -embarazada de cinco meses- y su pequeño de hijo de seis años, a la notaría Jarufe de Ñuñoa, donde el joven debía firmar un finiquito laboral junto a Wladimir Guajardo, representante de su ex empleador.

Cansados por la larga espera, los cuatro se movieron hacia la entrada de la oficina a tomar aire. De pronto, irrumpieron dos carabineros y tomaron a Daniel con fuerza, exigiéndole mostrar lo que portaba en su mochila.

Aunque no encontraron nada, lo acusaron de haber robado una tienda cercana, desde donde supuestamente había salido huyendo un par de minutos antes. La acusación desató la reacción de las decenas de personas presentes en el local, quienes habían visto que el joven no se había movido de la notaría en ningún momento.

Ni estos policías ni los demás que llegaron después escucharon a los trabajadores de la oficina ni a los clientes que esperaban. Daisy empezó a gritar que su marido no había hecho nada y comenzó un forcejeo tras el cual la pareja terminó en el suelo.

En ese momento, la abogada Paulina Maturana -quien también hacía trámites notariales- intervino en favor de los jóvenes. No sólo aseguró a los policíasque Daniel era inocente, sino que recriminó a los carabineros por el  procedimiento ilegal y abusivo que estaban realizando. Su emplazamiento también resultó inútil.

La profesional, que trabaja en el Programa de Derechos Humanos de la Universidad Central, no se conformó y tras la detención de Daniel y su familia, se trasladó hasta la 33° Comisaría de Ñuñoa, donde exigió ver a los detenidos, quienes estaban acompañados de su hijo, a la espera de la mamá de Daisy lo fuera a buscar.

La abogada presentó un reclamo por el trato dado a los detenidos, pero grande fue su sorpresa cuando cerca de las 17:30 quiso retirarse y no pudo hacerlo, pues se le comunicó que estaba detenida por maltrato de obra a carabineros. Así, por este supuesto hurto quedaron tres personas detenidas, aunque a la embarazada Daisy Ureta la dejaron en libertad a las 4 de la mañana

FORMALIZACIÓN Y ENGAÑO 
Al día siguiente y ante la jueza del Octavo Tribunal de Garantía de Santiago, Andrea Díaz-Muñoz, el fiscal Luis Jaramillo formalizó a Daniel Briones por el delito de hurto y a Paulina Maturana por maltrato de obra a carabineros. Ninguno tenía antecedentes penales, pero ingresaron esposados a la sala, por lo que la magistrada ordenó que se le retiraran los grilletes.

Las enormes diferencias entre las versiones de la fiscalía y de las defensas de ambos imputados quedaron zanjadas cuando el fiscal aseguró que existía un video que mostraba al imputado Daniel Briones retirándose de la tienda con las dos poleras sustraídas.

El defensor público de Briones, Cristián Medina, representó al tribunal que ese video era de enorme interés para la defensa, ya que comprobaría que el joven no tenía nada que ver con el delito investigado, por lo que correspondía exhibirlo en la audiencia.

A su turno, el defensor particular de Paulina Maturana, Julio Cortés, cuestionó que a pesar de que decenas de personas presentes en la notaría le aseguraron a los carabineros que estaban cometiendo un error, la fiscalía insistiera en formalizar.

Sobre el tema, el fiscal Jaramillo explicó que la policía aún no le entregaba el video y sostuvo que había testigos que reconocieron al imputado como autor del hurto.

DILIGENCIAS DE LA DEFENSA
Medina explica que tras la formalización, el caso pasó a manos del fiscal Francisco Jacir, a partir de lo cual se hizo mucho más fácil despejar las mentiras existentes en este caso. Jacir tomó declaración a nueve testigos que estuvieron en la notaría al momento en que irrumpieron los carabineros, quienes conformaron que los policías se equivocaron porque el imputado estaba desde mucho antes en la notaría.

Todas las declaraciones eran parecidas a la que efectuó Wladimir Guajardo, quien acompañaba a Briones: “En todo momento yo estuve presente y acompañando a Daniel. Lo traté de defender ante Carabineros. Incluso les mostré el documento del finiquito, pero aún así no me tomaron en cuenta, llevándolo de igual forma detenido”.

El mismo día de la audiencia de formalización, el defensor Medina solicitó al nuevo fiscal copia del video supuestamente incriminatorio. Sin embargo, pese a que el trámite no debiera demorar más de un par de días, la policía se retrasó varias semanas en entregar las imágenes a la fiscalía, de modo que la defensa sólo las obtuvo un mes después de la formalización.

La espera valió la pena, explicó Medina, porque ese medio de prueba –que el fiscal Jaramillo aseguró en audiencia que demostraría la autoría del imputado- fue lapidario: claramente, Daniel Briones no es la persona que cometió el hurto.

CARABINEROS DENUNCIADOS
Con estos antecedentes, ambas defensas pidieron a la fiscalía el sobreseimiento definitivo de la causa, a lo que ésta accedió. Así, ante la magistrada Viviana Gubelin, el defensor Cristián Medina y el abogado Julio Cortés -con el acuerdo de la fiscal Mónica Muñoz- solicitaron este sobreseimiento. El tribunal acogió la solicitud, aunque rechazó condenar en costas a la fiscalía, como pidió el defensor privado de Paulina Maturana.

Al final de la audiencia, Cristián Medina presentó ante el tribunal una denuncia contra los carabineros que participaron en el procedimiento ilegal. Asimismo, Daniel Briones y Maulina Maturana presentaron querellas contra todos los policías involucrados.

“El montaje de los policías para dejarme detenida fue burdo. Eran como las cinco y media de la tarde cuando les pregunto por qué me estaban deteniendo y a eso de las nueve de la noche llega un carabinero de apellido Ávila con un dedo ensangrentado, diciendo que yo lo había herido”, explicó Paulina Maturana.

Los querellados son los carabineros Luis Ávila Pérez, Moisés Donoso Moya y Alonso González Cerda; los cabos Jaime Gallegos Muñoz y Mariela Ormeño Vallejos, además de la subteniente Sandra Zapata Bustos.

Terminadas ya la audiencia y las presentaciones de denuncias y querellas, Daniel Briones se fue con su esposa Daisy -ya con nueve meses de embarazo- al hospital, ya que estaba a horas de dar a luz a su segundo hijo. En esta traumática experiencia construyeron un estrecho vínculo con Paulina Maturana, quien será la futura madrina del bebé.

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